Farmacia Comida: rescatando a familias de la inseguridad alimentaria en Honduras

En un esfuerzo por abordar la inseguridad alimentaria en Honduras, Fundación CAMO implementa una iniciativa única: Farmacia Comida, proyecto que inició en 2022 y que tiene como objetivo proporcionar alimentos nutritivos a familias vulnerables en el occidente del país.

En el último año, Farmacia Comida, que nace en el Programa de Nutrición de Fundación CAMO, ha entregado más de 2,670 baldes con alimentos a hogares en comunidades de los departamentos de Copán, Ocotepeque y Lempira.

Estas comunidades afectadas por la falta de acceso a alimentos adecuados, reciben en baldes o cubetas donadas que contienen carne de cerdo, cebada, arroz y barritas de avena para satisfacer las necesidades nutricionales básicas.

Farmacia Comida: una medicina para quienes “padecen hambre”

Debido al déficit en el área rural y el alto costo de los servicios de salud, el Programa de Nutrición, busca atender a pacientes de escasos recursos económicos con algún grado de malnutrición.

Estos pacientes enfrentan inseguridad alimentaria y nutricional por la falta de disponibilidad de alimentos, agravado por patologías preexistentes que empeoran su estado nutricional y calidad de vida.

Para mitigar estos problemas, se realizan donaciones de alimentos médicos o suplementos y se proporciona educación y asesoría nutricional.

Fundación CAMO despliega su programa de nutrición en el ámbito comunitario a través del proyecto Farmacia Comida, que funciona con la donación de baldes de comida donados por parte del Ministerio Cristiano Apostólico Harvest Call.

Un impacto directo en la vida de quienes necesitan

En el barrio Buenos Aires, en la periferia del casco urbano del municipio de Corquín, Copán, en el occidente de Honduras, reside una madre y sus dos hijos, los tres tienen condiciones especiales.

Se trata de María Rosario Landaverde, a sus 75 años de edad, es la única persona que puede velar por sus hijos, quienes tienen condiciones de discapacidad.

Con un hijo postrado en cama y otro afectado en su desarrollo por epilepsia, muchas noches, María Rosario y sus hijos, se han ido a dormir sin saber qué comerían al día siguiente.

A través de una alianza con Cafés Finos de Corquín (Cafico), Fundación CAMO logró llegar hasta el hogar de doña María Rosario con cubetas de comida, que han venido a ser el alivio nutricional para su hogar.

“Sólo hacemos el desayuno y la cena; preparo atol o avena, y a las 4:00 pm hacemos la cena”, explicó la madre, quien agradeció que Fundación CAMO y Cafico llegaran a su humilde vivienda con comida nutritiva.

Un esfuerzo conjunto

Bianca Ramírez, coordinadora del proyecto, destacó el impacto positivo que ha tenido la Farmacia de Comida en la vida de las familias hondureñas.

“Para muchas familias, estos baldes no sólo significan comida, sino su único plato en tiempos difíciles” afirmó Ramírez.

Para acceder al beneficio de entregas de baldes con alimentos durante seis meses, las familias deben cumplir con los siguientes criterios de selección: pertenecer a un núcleo familiar en condiciones de extrema pobreza, tener un miembro con bajos recursos económicos y presentar al menos una de las siguientes situaciones: ser un anciano abandonado, una madre soltera, un viudo o viuda, una persona con discapacidad, o un miembro de la familia con bajo peso.

Estas condiciones aseguran que el apoyo se dirija a quienes más lo necesitan, garantizando una mejora en su seguridad alimentaria y nutricional.

En la fase actual del proyecto se trabaja en coordinación con gobiernos locales e instituciones aliadas en ocho municipios del occidente de Honduras.

“Hemos visto un cambio nutricional en todas las familias a las que hemos asistido, además ha mejorado su condición y ánimo. Junto a CAMO hemos entregado más de 300 baldes de comida”. María Mercedes Pacheco, Cafico.