Durante 32 años devolvieron la vista a miles; hoy, necesitan tu luz para continuar
Hay historias que se cuentan con lágrimas de emoción. Como la de un abuelo que vuelve a ver a sus nietos. O la de una madre que, después de años, puede coser, leer o caminar con seguridad. Desde hace más de tres décadas, el Programa de Oftalmología de CAMO y la familia Robles ha hecho posible momentos así.
Desde 1993, este esfuerzo ha llegado a quienes más lo necesitan, personas que no pueden pagar una consulta o una cirugía, pero que merecen ver con claridad. Aquí se tratan cataratas, glaucoma, complicaciones por diabetes e hipertensión, con un nivel de atención que pocas veces se encuentra en nuestra región.
El Programa Social de Oftalmología, que se fortaleció con la consolidación del Centro Oftalmológico Robles y ha llegado a convertirse en uno de los pocos espacios en el occidente del país donde la población puede recibir atención visual especializada.
Solo el año pasado, más de 4,000 personas fueron atendidas. Una de cada cuatro recibió cirugía que, en muchos casos, les devolvió la vista.
Necesitamos de su ayuda para continuar
Sostener este programa no es fácil. Se necesitan insumos médicos costosos, tecnología precisa y, sobre todo, manos solidarias.
El doctor Pablo Robles, quien ha ofrecido su tiempo como voluntario por años en este programa social, explicó que “aquí vivimos cerca de un millón de personas y no hay servicio público de oftalmología”.
“Para una cirugía de catarata, por ejemplo, se necesita un lente intraocular que es caro, y esos gastos los asume la Fundación”, indicó.
Por eso, hoy te pedimos que nos ayudes a seguir iluminando vidas. Cada donación, por pequeña que sea, suma. Cada aporte hace posible que alguien vuelva a ver el mundo con sus propios ojos.
Hoy, ellos necesitan de tu luz para seguir devolviendo la vista a quienes más lo necesitan.